De regreso de Bogotá me compré, en el nuevo y espectacular aeropuerto El Dorado, un libro titulado "El sinsentido común", de Borja Vilaseca, periodista de El País de España y creador del master en Desarrollo Personal y Liderazgo de la Facultad de Economía de la Universidad de Barcelona, en ese mismo país.

Pienso que en nuestras escuelas y universidades deberíamos esforzarnos un poco más por estudiar y enseñar técnicas que inculquen y desarrollen el sentido común. En mi opinión, muchas cosas de las que nos han pasado y nos están pasando en Venezuela se deben principalmente a que la mayoría de nosotros carecemos de los más elementales principios que rigen al sentido común y por el contrario, nos cansamos de tomar decisiones que manifiestan un uso profundo del sinsentido común como lo titula Villaseca.

En la columna de la semana que viene me voy a adentrar en el análisis de este libro más en detalle y en especial  lo relacionado al sistema de relaciones laborales venezolano. En esa área específicamente tenemos mucho que aprender del sentido común.

Siempre me han gustado las citas de pensamientos de los grandes hombres de la historia. Creo que resumen en unas simples líneas ideas profundas que se te quedan grabadas en la mente y lo más importante te hacen reflexionar. El Sr. Villaseca hace una recopilación excelente de pensamientos asociados al tema de su libro. Abajo transcribo algunos de ellos y los relaciono con un ejemplo de la realidad del país. Te invito a que tomes las frases y las relaciones con el ejemplo que más rápido te venga a la mente y luego concluyas cómo andamos de sentido común en estos momentos y por estos lados.

"El sentido común es el menos común de los sentidos" (dicho popular). Yo lo comparo con esto de que "Las captahuellas en los supermercados son un instrumento liberador" (dicho gubernamental).

"Aunque la mayoría de las personas no van hacia ninguna parte, es un milagro encontrarse con una que reconozca estar perdida" José Ortega y  Gasset.  Yo lo comparo con algo así como: "El socialismo del siglo XXI es el mejor sistema de vida... pero aun estamos en un proceso de transición hacia el mismo" (otro dicho gubernamental).

"Qué triste época la nuestra: es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio" (Albert Einstein).  Lo podemos comparar con por ejemplo: "Los empresarios se lucran del sudor de los trabajadores. Son unas sanguijuelas..." (dicho gubernamental).

"Cada vez que te encuentres del lado de la mayoría es tiempo de hacer un pausa y reflexionar". (Mark Twain). Yo siempre he dicho que una mayoría que impone su opinión en contra de una minoría es un atropello a la dignidad de aquellos que piensan distinto.

"Deseamos ser felices aun cuando vivimos de tal modo que hacemos imposible la felicidad" (San Agustín).  Por ejemplo, tenemos un país riquísimo, con abundantes recursos naturales, con un clima equivalente al paraíso y nos pasamos la vida discutiendo y peleando entre nosotros sobre el sistema económico más adecuado, haciendo colas o huyendo de la delincuencia.  La verdad es que o estamos locos o somos tan obtusos que no podemos ver el despeñadero que se nos avecina.

"La locura es seguir haciendo lo mismo y esperar resultados diferentes" (Albert Einstein). Qué te parece si lo comparamos con: "Y para resolver los problemas derivados de los controles de cambio, precios y demás, vamos a aplicar controles más estrictos" (mensaje gubernamental).

"Formamos parte de una sociedad tan enferma que a los que quieren sanar se les llama "raros" y a los que están sanos se les tacha directamente de "locos" (Jiddu Krishnamurti). La mayoría del país quiere paz y libertad. Sin embargo, se nos dice que lo importante es el socialismo del siglo XXI y se nos tilda de locos.

"Lo que se les dé a los niños, los niños lo darán a la sociedad". Aquí mi reflexión: o le enseñamos a nuestros niños sentido común, o el desastre que vivimos hoy se multiplicará por cien veces en los años que vienen.  La única forma de cambiar es hacerlo desde adentro y empezando por nuestros hijos.

Hasta la semana que viene.

Juan Carlos Varela / Abogado

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