Actualmente una persona invierte más de 48 horas semanales frente a su escritorio en la oficina. Y aunque las empresas se preocupen por la salud de sus colaboradores en algunas ocasiones ellos mismos olvidan los aspectos ergonómicos y psicosociales.

En este sentido, Luis Enrique Velásquez, director nacional de Operaciones del Grupo Eulen, informa sobre los principales riesgos a la salud en los trabajadores y la manera de minimizar su impacto.

Sedentarismo

El permanecer sentados 8 horas diarias puede generar problemas a la salud, por lo que se recomienda trasladarse de un área a otra en lugar de enviar un mail o realizar una llamada telefónica, subir las escaleras antes de usar el ascensor y usar baños que estén más lejos. Es importante llevar a cabo pausas que obliguen a uno a levantarse, moverse y cambiar de postura.

No descansar

El trabajar sin parar no hará nada bueno para el trabajador, el no tomar un descanso puede llevar a que aumente el nivel de estrés. Lo recomendable es tomárselo con calma, beber agua fresca frecuentemente para mantenerse hidratado y caminar. Siguiendo estas recomendaciones se experimentarán menos agotamiento emocional y más satisfacción en el trabajo, además de menos dolores de cabeza y de espalda.

Distraerse demasiado

Las interrupciones durante el trabajo ocasiona atrasos en los asuntos laborales y esto ocasiona estrés extra. Cuando sucede esto, lo mejor es tomarse un descanso, respirar, distanciarse del lugar de trabajo un momento, relajarse y retornar cuando esté listo.

Demasiado tiempo delante de la pantalla

Estar tanto tiempo delante de una pantalla electrónica puede llegar a ser perjudicial para la salud cerebral, ya que puede causar trastorno del sueño e incluso síndrome metabólic. En este caso es recomendable practicar la regla 20-20-20, cada 20 minutos fijar la mirada en un determinado punto u objeto a 5 metros de distancia durante 20 segundos.

Tener una mala postura

Una buena postura a la hora de trabajar es fundamental para evitar lesiones y dolores crónicos. Los hombros caídos, podrían originar lentitud en la digestión y en la circulación, asimismo las personas que se sientan con la espalda recta expresan tener mejor autoestima, carácter y menos temores frente a quienes se sientan con una postura incorrecta.

Actualidad Laboral / Con información de Mundo Ejecutivo