Cinco años involucrado en un proceso judicial, por ejercer acciones sindicales en la empresa del Estado Ferrominera del Orinoco, no han debilitado a Rubén González en la lucha por los derechos de la clase obrera. “Si mañana tengo que tomar esa decisión, por el bienestar general de los trabajadores, por hacerle justicia a los trabajadores, no me temblaría el pulso para volverlo a hacer”, dijo.


En 2009 acompañó a los trabajadores en una paralización de actividades que duró 16 días, hasta que lograron reunirse con el Presidente de la industria para ese entonces, Radwan Sabbagh. Las demandas eran por violación al contrato colectivo, que habían firmado a principios de ese año, “el descontento general de todo, el incumplimiento de la dotación, lo que era el comisariato, prestación social, ahorro, un cúmulo de incumplimiento que lo llevó a esa paralización”, explicó González.


Luego de ser detenido, en Septiembre de 2009, e imputado por lo delitos de agavillamiento, instigación a delinquir, restricción a la libertad del trabajo y violación de zonas de seguridad, permaneció detenido mientras se realizaba el juicio. Fue condenado a 7 meses, 6 meses y 2 días.


Según recordó, esa decisión fue rechazada por diferentes sectores de la sociedad “no era Rubén González, es prácticamente una agresión a lo que es la labor originaria de la dirigencia sindical”. Insistió en que durante el proceso no hubo elementos para demostrar la presunta comisión de los delitos.


Pero “en menos de 48 horas”, explicó que el Tribunal Supremo de Justicia, anuló la sentencia y se avocó al caso. Este nuevo proceso, ahora en Caracas, lleva ya 14 meses. Este miércoles 23 de abril, fue absuelto de todos los cargos.


“Siempre con optimismo, esperanza y tranquilidad”


Más allá de sentirse afectado, González asimila lo vivido como un aprendizaje “a lo largo de esos 5 años de persecución política lo que han hecho es endurecer mi carácter, madurar en mi carácter y aprender muchas cosas que antes realmente no conocía. Los tribunales de justicia los conozco, no porque me lo cuenta, sino porque lo viví en carne propia cómo se hace injusticia”.


En el ámbito familiar, también aseguró que han sido fortalecidos. “Le doy gracias a Dios porque me dotó de una familia guerrera, luchadora, que no se amilana, de combate”. Tiene casi 34 años de casados, 4 hijos y 8 nietos.


Datos personales


Rubén González tiene 30 años trabajando en Ferrominera del Orinoco, como Técnico Soldador. Comenzó su actividad sindical hace 16 años, en el Sindicato Único de Trabajadores del Hierro (SUTRAHIERRO) – Bolívar “me conlleva a ser dirigente sindical son las injusticias generales que están a mi alrededor y era muy inquieto”. Ahora ya tiene dos períodos como Secretario General de Sindicato de Trabajadores de Ferrominera (SINTRAFERROMINERA).


Actualidad Laboral / ASS