Su vinculación con el sector empresarial empezó cuando tenía siete años. Asistía desde esa edad al negocio que hace casi seis décadas iniciaban su padre, su tío y un socio: Acumuladores Duncan.

Desde bachillerato y hasta la universidad, durante las vacaciones hacía pasantías en la empresa. Hace 45 años, al terminar su carrera de Ingeniería Industrial, Silvano Gelleni se incorpora definitivamente a esta organización. Actualmente es su presidente.

“Me encantó mi carrera, la disfrute muchísimo y si tú me preguntas del trabajo que yo hago ¿Qué es lo que más disfruto? Son mis ratos, mis momentos y mis días en las plantas, conversando con los trabajadores, analizando problemas, contribuyendo en la medida de mis posibilidades a la solución de problemas que se están planteando tanto desde el punto de vista técnico, como desde el punto de vista organizacional, me apasiona estar en la fábrica”, dice el empresario.

Silvano Gelleni destaca que la constancia, el trabajo, el compromiso y la fe en el futuro han sido claves en el éxito de su gestión empresarial y en el de la organización a la que representa. “Los negocios, sobre todo los negocios industriales (…), no rinden sus frutos en los primeros años de vida, por lo que hay que tener una visión de largo plazo, una visión de futuro para poder esperar el proceso de maduración de esas inversiones que son de largo plazo”, sostiene.

El capital humano que lo acompaña en la organización a la que representa es de gran importancia para Gelleni, quien sostiene que la relación directa  y constante con los trabajadores es parte de la cultura de la empresa. “Los escucho, aprendo mucho de ellos, me dan mucha energía, el contacto con los trabajadores me llena mucho”, asegura.

Acumuladores Duncan en sus tres plantas y en su área industrial genera 1.500 puestos de trabajo directos. “Hemos podido apreciar y descubrir o ratificar el compromiso de todos los trabajadores, el apoyo que le han dado a la gerencia a lo largo de todos estos meses duros ha sido algo muy estimulante”, sostiene.

Silvano Gelleni, no solamente se ha destacado en la conducción de esta reconocida fábrica nacional de baterías para vehículos, también es reconocido por su labor gremial en el sector empresarial. Presidió la Cámara de Fabricantes Venezolanos de Productos Automotores (FAVENPA), y actualmente es uno de sus directores. También forma parte de la Junta Directiva de CONINUSTRIA y fue representante por el sector industrial en el Directorio de FEDECAMARAS. “El campo industrial me apasiona, pero el campo gremial igualmente lo hace”, dice.

Gelleni reconoce que participar activamente en un gremio empresarial amerita invertir tiempo y esfuerzo, pero considera que la labor en las instituciones empresariales es valiosa porque permite coordinar acciones que contribuyen con el sector y con la sociedad mediante el aporte de ideas, de proyectos y de estudios. “A veces el tiempo personal se compromete mucho porque hay que dedicarle un poco a cada una de estas responsabilidades, pero no se pueden eludir, no se pueden evitar, hay que estar presentes en todas ellas”, dice.

Recientemente la trayectoria y labor empresarial de Silvano Gelleni fue reconocida por FEDECAMARAS  al otorgarle el premio “Empresario del Año”.

Luego de más de cuatro décadas de actividad constante, este industrial no se plantea el fracaso como una opción. “Siempre debemos ser optimistas, pueden haber algunas equivocaciones en el camino, pero la capacidad de identificarlas y de rectificar es lo mas importante”, dice.

Actualidad Laboral/JM