Estamos hartos de oir que encontrar clientes es una misión cada vez más difícil para las empresas pero, ¿qué hay del talento? Ahí fuera hay millones de profesionales deseando conseguir un nuevo empleo y no es menor el número de organizaciones que buscan perfiles que estén a la altura de las nuevas necesidades técnicas.

Pero muchos de esos perfiles escasean, pues dominan disciplinas que apenas llevan unos años implementándose, y la competencia por contratarles es voraz. Mientras tanto, estos profesionales tienen un sinfín de canales para acceder a las distintas vacantes y al final quedarse con la que más les satisface.

Seducir al talento que buscamos no es tarea fácil, pero ¿qué hay del que ya tenemos? Conseguir que los mejores empleados permanezcan en nuestra organización tampoco es tarea fácil, porque ellos también cuentan con recursos para tantear el mercado laboral y su oportunidades.

Ante un panorama así, lo cierto es que captar y retener talento se ha vuelto una ciencia tan compleja como encontrar y fidelizar clientes. Por eso algunos expertos en recursos humanos encuentran similitudes entre el trabajo de un marketero y el de un reclutador. Tanto es así, que hay técnicas que ambos pueden poner en práctica para lograr sus fines. Aquí te presentamos seis prácticas de marketing que pueden aplicarse en la gestión de recursos humanos:

Gestiona tu marca en redes sociales

Igual que el Departamento de Marketing gestiona la marca en redes sociales para mantener un diálogo con los clientes, el de Recursos Humanos tiene que hacer lo propio para que la empresa dialogue con expertos y profesionales del sector. Una buena forma de empezar es poniendo a punto nuestra página de empresa en LinkedIn y dotarla de contenido de calidad, donde además de actualidad de nuestra compañía, generemos debate y diálogo en torno a nuestro sector o industria.

Inspírate en el ‘funnel’ de compra de un ecommerce

Los marketeros siempre te dirán que cuanto más sencillo sea el proceso de compra en un comercio electrónico, más fácil será que el usuario efectúe su compra. Si consigue retenerle, que llene su carrito de compra y al final se encuentra con un formulario interminable que le pide muchos datos (la mayoría realmente innecesarios) lo más fácil es que acabe abandonando.

Ocurre lo mismo con un candidato. Si el proceso de inscripción en la oferta de trabajo es interminable, será más probable que no lo termine. A no ser que seamos Facebook o Google, donde por lo general la gente ‘mata’ por trabajar, hay que tratar de poner las cosas fáciles.

Sé más humano

Todavía es habitual pinchar en la pestaña de ‘Trabaja con nosotros’ de muchas web de empresas y encontrarse una información fría, excesivamente corporativa y carente de todo atractivo. Así es difícil seducir al talento nuevo.

En lugar de textos, es preferible el vídeo (tan recurrente en las estrategias de marketing online) y frente a datos fríos es preferible contra historias que transmitan la cultura y los valores de la empresa de manera más emotiva. Los testimonios de los trabajadores también pueden aportar mucho y servir de inspiración, igual que incluimos opiniones de clientes cuando queremos convencer a otros de que nos compren.

Crea embajadores de marca dentro de tu empresa

Es genial que nuestro clientes adoren nuestra marca pero, a menos que seamos Apple, si queremos facilitar que eso ocurra tenemos que empezar primero por nuestro propios empleados. Un trabajador contento, hablará bien de su empresa y sentirá orgulloso de formar parte de ella, y no hay mejor publicidad que el ‘boca a boca’. Y al revés, si va diciendo por ahí que en su trabajo no se le valora o que le tienen explotado, de poco servirá que en tus comunicaciones vayas diciendo que eres una empresa flexible, porque nadie lo creerá.

Prueba con el branded content o el contenido patrocinado

Los marketeros recurren al branded content cuando quieren evocar emociones en el consumidor relacionadas con la marca. Es un tipo de publicidad más sutil que apela a sentimientos y por eso es más efectiva. Los contenidos patrocinados suelen tener branded content, porque sin hacer alusión específica a la marca, se plantea un escenario donde los beneficios y significados de la misma salen a relucir.

En lugar de emocionar o motivar al cliente, podemos hacer lo propio con esos profesionales a los que queremos acercar a nuestra organización, con reportajes o contenidos que traten asuntos que les preocupan y en lo que nosotros tenemos algo que aportar.

Ve donde esté el talento

Dicen que recibimos una media de 3.000 impactos publicitarios al día. En medio de tanto ruido, las marcas están aprendiendo a afinar el tiro, y ya no se anuncian en todos los soportes o canales posibles, sino en aquellos donde se encuentra sus potenciales consumidores.

Como empresa que busca talento, debes hacer lo propio, conocer dónde se encuentran los profesionales que más te interesan e impactarles allí donde estén.

Sírvete de influencers

Las campañas con influencers se han vuelto algo muy frecuente en muchas estrategias de marketing, porque las marcas confían en su capacidad de cambiar los hábitos o incluso la forma de pensar de los usuarios. Por eso es práctico cuando se trata de vender pero también para construir imagen de marca, y esto es perfectamente aplicable a consumidores pero también a profesionales.

Si queremos que estos perciban nuestra empresa como un lugar idóneo en el que trabajar, qué mejor que contar con la colaboración de algún experto con reputación que ya haya trabajado con nosotros o que nos conozca y que sea él mismo quien comparta su positiva experiencia.

Actualidad Laboral / Con información de TicBeat